La Columna
de angel irra carceda
-Un informe triunfalista, que quedó a deber
El lunes en el Recinto del Poder Ejecutivo estatal, en Chilpancingo, se echaron las campanas al vuelo.
No es para menos. De hecho, todos los gobernantes lo hacen al rendir un informe de actividades.
Pero quienes fueron (o fuimos) observadores del evento, que no se rindió ante el pueblo y sí ante invitados especiales encapsulados en esa explanada, tenemos que señalar algunos detalles que no deben pasar inadvertidos.
Por un lado, al interior, aplausos, loas, la euforia por lo que, se supone, por lo que se asegura, se ha realizado para abatir rezagos en Guerrero.
Pero, por el otro lado, al exterior de ese Recinto, las múltiples manifestaciones de descontento con el gobierno estatal.
Las manifestaciones, sobre todo, por un sistema de Educación que ha dejado mucho que desear. Y que, quizá por eso, no se profundizó en el tema de este sector. Y creo que hicieron bien, porque no se observa cómo contrarrestarlo.
Mal, muy malo, que a alguien del gabinete se le haya ocurrido la gran “ideota” de enviar a los inconformes de este sector grupos de choque conformados por transportistas.
Fueron a confrontarlos para cuidar el evento en el Recinto, pero afortunadamente los encontronazos no pasaron a mayores. Pero el riesgo de que así sucediera siempre estuvo presente.
Por cierto, la gobernadora lanzó con fuerza un No a la represión. Y, adentro, sus afines le aplaudieron a rabiar. Y se entiende.
Pero afuera del Recinto operaba contra manifestantes un grupo de choque enviado para contenerlos y evitar que llegaran a las puertas del inmueble gubernamental a importunarla. Faltaba más.
Exclamó reconocimientos a AMLO. Resaltó más de 20 mil millones de pesos a Guerrero para obras en regiones como la Montaña.
Pero, lo siento, no se escuchó un informe pormenorizado de la obra pública en el estado, con el presupuesto asignado al gobierno de Guerrero. Quedó a deber en este rubro.
En materia de seguridad pública, igual de trunca la rendición de cuentas. Solo reiteró el objetivo de seguir realizando acciones para abatir la delincuencia, y sobre todo a la organizada, que -salvo lo que Ustedes opinen- siguen tan campante en esta tierra suriana.
Se fue, en este tema por el aspecto laboral, fundamentalmente, y por lo que respecta a la famosa Mesa de seguridad y sepa que tantas cosas. Flaco, muy flaco este informe sobre el tema.
Mientras que en Guerrero operan a su entero gusto grupos de la delincuencia organizada que mantienen en su poder muchas regiones.
Citó que estamos a toda mother en materia de seguridad alimentaria por la autosuficiencia en la producción del maíz. Ajá.
Pero los empresarios del ramo todo el año han denunciado que Segalmex se ha negado a venderles el grano de Guerrero y que lo tienen que comprar a precios exorbitados en otros estados.
Y los hombres del campo guerrerenses, una y otra vez, han acusado la desatención presupuestal del gobierno federal y estatal.
Y en materia política, pues ahí quedó todo a la vista. La gobernadora resaltó una pluralidad y respeto, que no se reflejó en el Recinto oficial.
La soberanía popular -erde, se lee chingón- no estuvo realmente representada en el informe.
Solo acudió, si acaso, el 50 por ciento del Congreso de Guerrero, conformado por 46 legisladores. Fue evidente la falta de operación política.
Le hicieron vacío diputados del Partido Revolucionario Institucional y el de la Revolución Democrática.
Fue evidente, también, la ausencia de dirigentes de partidos políticos de oposición.
No hicieron eco a la convocatoria a este evento personajes políticos de talla nacional ni gobernantes del mismo nivel.
De la gobernabilidad en el estado de Guerrero, que presumió, esa sí que es una herencia de la pasada administración. Y no puede negarlo.
Hay más sobre este primer informe, pero los jodidos apagones que ha generado la Comisión Federal de Electricidad nos obligan a que hasta aquí se las deje.
De hecho, esta entrega sería la noche del lunes, pero esos apagones motivaron que se quedara en el tintero. (angelirracar@hotmail.com)