
De manera puntual y responsable, Evelyn Salgado pospuso para el 9 de noviembre el acto republicano de rendición de cuentas en la sede del Poder Ejecutivo estatal (Palacio de Gobierno). Días después, canceló definitivamente el evento, a diferencia de algunos irresponsables presidentes municipales que no les importó el dolor por el que estaban atravesando miles de acapulqueños y habitantes de los municipios de Coyuca de Benítez y San Marcos, quienes perdieron sus viviendas y a sus seres queridos.
El voyerista
Por Alfredo Guzmán
- ¿Muera el rey, viva la reina?
En política, los acuerdos son para romperlos. Como las leyes, son para violarlas, aunque para resolver diferencias, hay un árbitro, que se supone imparcial. Pero lo cierto es que el poder no se comparte.
Recuerdo un proceso político interno, que promovió que se hicieran grupos en torno a varios precandidatos a Coordinador (a) de los Comités de Morena, mal llamados “corcholatas”.
En el estado de Guerrero, hubo quienes simpatizaron con Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Ricardo Monreal y Adán Augusto.
Destacaron por su beligerancia, el diputado Alfredo Sánchez Esquivel, las ediles de Chilpancingo Norma Otilia y Acapulco Abelina López, realizaron varias acciones y tomaron actitudes, que en un ejercicio supuestamente democrático y de un mismo partido, eran retadoras y groseras contra la gobernadora, que en muchos casos dejaron de asistir a los eventos oficiales por andar en campaña abierta.
Desconozco si fue cortesía política, pero no hubo reclamos, al menos públicamente de parte de la Gobernadora Evelyn Cecia Salgado Pineda, contra quienes se montaron en sus machos y altivamente observaron y creyeron que ya iban en caballos de hacienda.
El diputado Alfredo Sánchez Esquivel, quería forzar y quedarse en la Coordinación de la Jucopo y lo sentaron, al grado de que lo denunciaron por violencia política en razón de género, cuestión que ya le costó ser candidato para el próximo proceso electoral y entendió que no puede patear el pesebre. También de corrupción, que está latente, por la destrucción de una biblioteca, que hoy es un monumento a la corrupción.
Norma Otilia y Abelina López desviaron recursos de sus comunas y realizaron conferencias, concentraciones y actos propagandísticos, en favor de Marcelo Ebrard en su promoción. Se entiende que varios funcionarios lo hicieron por Claudia y pintaron de consignas, las ciudades de Guerrero.
Pero la política es de momentos y circunstancias.
El 6 de septiembre fue el día en que se dieron a conocer los resultados de quién ganó la responsabilidad de ser el Coordinador de los Comités de Morena, resultando ganadora Claudia Sheinbaum Pardo.
Cautelosa y sin avisar a nadie, Abelina López Rodríguez, quizá conociendo los resultados, solicitó a un personaje cercano a Claudia, que le hiciera un espacio unos días antes de que se hicieran públicos los resultados, para dialogar con la única candidata mujer. Se le concedieron 10 minutos.
Es decir, Abelina López Rodríguez negoció con Claudia, un acercamiento a cambio de dejar de apoyar a Ebrard, pero no le dijo a nadie. 7 días después, la edil de Acapulco, invitó a Marcelo, ya perdedor a su 2º informe de labores ocurrido el 10 de septiembre. Seguía la simulación.
No hay que espantarse. Abelina deja embarcados a sus equipos de campaña, antes de tiempo, no les avisa. Se blinda y negocia sus intereses. Al final de cuentas, son del mismo partido, pero en la contienda interna, hubo ataques, descalificaciones, descortesías y sin duda desvío de recursos de los equipos.
La aventura rebelde, terminó rápido. Hoy Alfredo Sánchez Esquivel, Norma Otilia y Abelina López, docilitos, doblan las manos en busca del perdón de la gobernadora, cosa natural.
Esperan que no haya represalias y juran unidad para lo que les queda como ediles.
Cada una y uno, exhiben sus formas de actuar, sus intereses, sus traiciones, antes de tiempo.
Cosas de la política.
¡Muera el rey, viva la reina?