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Aprovechando del espacio como titular se encarga en señalar a candidatos electorales, sin que respete la normativa de los tiempos para que los aspirantes, ex y actuales ediles respondan a las comprobaciones financieras.
Carlos Díaz Figueroa
El auditor del ASE inclinado en la guerra sucia contra los perfiles electorales
De manera irresponsable con las formas de normatidad en las observaciones en cuentas pendientes, el auditor del ASE Marco Cesar Peralta se inclina a lo referente en una guerra sucia contra aspirantes electorales.
El funcionario del órgano autónomo se ocupa en declarar y filtrar informacion directa con algunas situaciones inconclusas en cuentas quienes en su momento fueron servidores públicos y otros que ahora son candidatos.
Aprovechando del espacio como titular se encarga en señalar a candidatos electorales, sin que respete la normativa de los tiempos para que los aspirantes, ex y actuales ediles respondan a las comprobaciones financieras.
Lo evidente de este subordinado dependiente del propio gobierno y congreso del estado es la actitud del chantaje en una guerra sucia en el argumento en falsos señalamientos en la imagen de los candidatos a la elección.
Y no solamente difama filtrando información confidencial del órgano fiscalizador, sino, el auditor también se conduce mediante al desconocimiento en excibir cuentas que tienen plazos para la solvencia y comprobación.
Es decir, un empleado sin oficio al igual sin conocimiento del procedimiento de aquellos servidores públicos que aún tienen pendientes en comprobar estados financieros que en tiempo y forma no solventaron.
Tan extraño es que el auditor este inclinado en la guerra sucia contra aliados morenistas, en el caso, de la actual presidenta y en relación por el municipio de Acapulco Abelina López a quien le dicta señalamientos directos.
Y no se diga al igual a sus adversarios que con reservas de ingratitud le envía señales, por encima de las normas de comprobación, es decir, un fiscalizador oportunista ante la falta de capacidad en el papel de auditor estatal.
Pero es algo en común en Cesar Peralta actuar con el hígado y aparentar un perfil de honradez en este momento de titular en la auditoria del estado en pretender conducir el legado de la 4T en no mentir, no robar.y no traicionar.
A lo referente bueno Bueno fuera que revisara su historial oscuro de corrupción en aquellos tiempos del privilegio en gobiernos anterior, en la que desvíos recursos públicos y ahora les dicta observaciones financieras pendientes.
Solamente, por citar algunos, en la oficialia del ayuntamiento capitalino, al igual en la subsecretaria de Finanzas en salud y en la contraloría interna de la SEG, entre otros espacios donde fue sujeto de corrupción.
Dicen que antes de escupir para arriba hay que hacerlo también hacía abajo, el auditor de la ASE tiene aires de grandeza entre el orgullo egocéntrico y soberbio porque cuando no es empelado aterriza y camina de bajo perfil