Por: Daniel Genchi Palma.
Sicarios del estado de Chiapas, acalambraron esta mañana al Padre Jose Filiberto Velazquez Florencio,, cuando se paró a comer en la carretera, siendo perseguido por hampones, quienes les apuntaban amenazantes con sus armas y les pedían ya apagaban las luces de la camioneta, al tiempo que los seguían, cuando el prebistero alcanzó a llegar a la caseta y cruzó, los maleantes dieron la vuelta, lo que ocasionó que el Centro de Derechos Humanos Minerva Bello denunciará los hechos através de sus redes sociales del cura.
En la misiva la Organización no Gubernamental de Derechos Humanos se dirige a las autoridades en la que manifiestan que es urgente y necesario garantizar su seguridad deJose Filiberto Velazquez Florencio,: “Quienes integramos el Centro de Derechos Humanos Minerva Bello A.C. hacemos un llamado enérgico a las autoridades competentes de los tres órdenes de gobierno, para que garanticen la integridad física y psicológica de nuestro director, Pbro”. Indica la hoja tamaño carta de dos o tres cuartillas.
Precisan que Jose Filiberto Velazquez Florencio, quien esta mañana cuando regresaba del estado de Chiapas -lugar en el que estuvo dando acompañamiento a normalistas de Mactumatzá y a personas migrantes- habiendo pasado la presa de Malpaso se detuvo en un paraje para tomar sus alimentos.
Es ahí entonces cuando es seguido por un vehículo tipo camioneta con hombres armados. quienes le hacen señales de que se detengan y echándoles las luces; debido a que el equipo de seguridad se percata del riesgo de detenerse es que deciden no hacerlo y tratar de llegar a la caseta lo antes posible lo que provocó una persecución persistente y amenazante.
Afortunadamente cuando el vehículo tipo camioneta se percata de que el auto del padre Fili llega a la caseta se da la vuelta.
Por los hechos narrados, es que se solicita apoyo en dos retenes que están en la zona, pero desafortunadamente ni la Guardia Nacional ni el Ejército han prestado auxilio.
La labor del padre Fili como defensor de derechos humanos, así como la que realizan muchas otras personas defensoras a lo largo y ancho del territorio nacional, tiene una importancia decisiva para lograr el respeto, la protección y la observancia de las normas relativas a los derechos humanos, por lo que necesitan y merecen la protección que la Declaración sobre los defensores de los derechos humanos brinda a quienes realizan esta actividad.
El padre Fili a sido un sacerdote duramente criticado por el gobierno, luego de lograra pacificar ciertas zonas de Guerrero como la zona centro y montaña baja, donde los grupos criminales hicieron un pacto de no agresión y los homicidios dolosos y enfrentamientos entre grupos criminales bajaron considerablemente.
Fili acudió hasta Chiapas porque fue invitado para apadrinar a los egresados de la Escuela Normal Rural de Mactumatzá Chiapas, donde estuvo algunos días y hoy durante su regreso, tal vez alguien lo reconoció en el restaurant cuando lo llamaron por su nombre y le paso el pitado a los malos, porque jueguito que acabaron de comer y abordaron sus vehículos ya los venían siguiendo.