![](https://periodismodigital.mx/wp-content/uploads/2023/09/376259949_771776318290829_3692524475838683272_n.jpg)
De Julio Ayala Carlos
- El chantaje de Domingo Salgado MÁS QUE UN ASUNTO LABORAL, el de Domingo Salgado Martínez, quien junto con un reducido grupo de trabajadores mantiene bloqueado el Palacio Municipal capitalino, es de carácter político, haciendo uso del chantaje (al que siempre recurre), la presión y la amenaza para doblegar a las autoridades y conseguir sus fines. Así lo hizo, por supuesto, con Marco Antonio Leyva y el anterior alcalde Antonio Gaspar, a quien de manera impune les tomó la sede del Ayuntamiento, afectando con ello a miles y miles de chilpancinguenses.
Es cierto. Los trabajadores, todos, deberían ganar mayores ingresos, a fin de tener, junto con su familia, una vida decorosa. ¿Quién no quisiera ganar más que el salario mínimo? ¿Quién no quisiera ganar más que eso, como los 20 mil pesos que obtiene el propio Domingo Salgado Martínez, como trabajador administrativo?
Por supuesto que todos, pero ocurre, como en todos lados, que los recursos no alcanzan, de tal forma que con todo y que el presidente de la República incremente el salario mínimo, éste no se refleja en el presupuesto, y en consecuencia los ayuntamientos, como es el caso de Chilpancingo, carecen de los dineros suficientes para otorgarlos a los trabajadores.
No obstante, un boletín informativo del gobierno municipal capitalino, el que encabeza Norma Otilia Hernández Martínez, da cuenta que en la primera quincena de octubre “se nivelará el salario mínimo de 20 trabajadores que faltan del Sindicato Independiente de la sección 14 del Ayuntamiento de Chilpancingo”, por lo que se cumple con la demanda, en tanto que Salgado Martínez exige que la nivelación se haga efectiva a 992 empleados, “quienes en su mayoría reciben una compensación que al sumarse con su salario rebasan el salario mínimo”, por lo que en términos reales tendrían un aumento salarial que van desde 30, 40 y 50 por ciento.
Un ejemplo. El propio dirigente sindical tiene un sueldo, o tenía hasta el 16 de septiembre de 2018, de 5 mil 411.67 pesos, un adicional de 14 mil 309.80 pesos, por concepto de vida cara 120 pesos, bono por educación de 420 pesos, por transporte 114.30 pesos y por despensa otros 66.75, haciendo un total de 20 mil 442. 52 pesos, algo fuera de lo normal cuando tiene, o tenía, un trabajo administrativo.
Obvio es que este salario, el de Domingo Salgado, que por cierto tiene años sin trabajar, se lo arrancó bajo chantaje, amenazas y presión al entonces alcalde Antonio Gaspar Beltrán, quien dejó en total desastre financiero el gobierno municipal. Si no me cumples, te voy a paralizar el gobierno y a ver qué haces, fue la amenaza de entones, por la que el edil, con el miedo reflejado en el rostro no le quedó más que decirle que sí.
Claro. No es la primera vez que amenaza, chantajea y presiona. Lo hizo con Gaspar Beltrán, cuando se dio cuenta que el alcalde, con todo y que hablaba mucho, era un pelele. Lo hizo con Marco Antonio Leyva Mena, cuando se enteró del pleito que el edil tenía con el gobernador. En ambos casos, Domingo Salgado Martínez se salió con la suya, y lo mismo pretendió hacer con Norma Otilia Hernández Martínez, bajo la idea de que la alcaldesa está vulnerable, y en consecuencia, si no nos da lo que queremos, la van a tumbar del cargo.
¿O cómo es que se explica que estén exigiendo, “en la coyuntura”, un incremento del 150 por ciento en el caso del seguro de vida?
Por cierto, en la administración de Gaspar Beltrán, “sólo se tenían asegurados 500 trabajadores operativos, y actualmente son 2 mil 408 operativos y administrativos”, lo que sin duda es un gran avance, como también el que el pago de las quincenas de los trabajadores sean puntuales.
Hay que decirlo. Decíamos al principio que los trabajadores deben, y deberían ganar más. Sin embargo, también hay que decir que entidades como los ayuntamientos no tienen los recursos suficientes para pagarles a todos 20 mil pesos quincenales, como a Salgado Martínez que, indudablemente es un fraude. Lo que sí es cierto es que con la toma del Palacio Municipal, están afectando a la ciudadanía que desde hace una semana no puede realizar ningún trámite ante la intransigencia de quienes suponen que bajo la presión, la amenaza y el chantaje van a conseguir lo que quieren.
Lo que sí creo es que el tal Domingo Salgado Martínez, ahora se topó con pared…
Comentarios: ayala.jc30@gmail.com